Ingredientes:
Preparación:
Lavar y cortar la fruta en dados y pelar y cortar la cebolla en dados. Lavar el ganso y secarlo, condimentarlo bien con sal por dentro y espolvorear con al menos 1 cucharada de mejorana.
Rellenar el ganso con los ingredientes cortados en cubitos pero no con demasiada fuerza para que el ganso no reviente. Tapar todas las aberturas con brochetas de madera, que luego se atan transversalmente con hilo. Gire las alas hacia atrás. Frotar con sal, pimienta y mejorana.
Coloque el ganso con la pechuga hacia abajo sobre la rejilla del horno (precalentado a 200°C). Colocar una bandeja recogedora de aceite con agua (2 cm) debajo.
Cuando el dorso esté ligeramente dorado, dale la vuelta al ganso (después de unos 60 minutos). Continúe asándolo en el horno lentamente (unos 90 minutos más). Rocíe la carne con sus jugos frecuentemente y pinche la piel con un tenedor para que la grasa se desprenda. Una cantidad especialmente grande de grasa se localiza entre las piernas y el pecho. Aquí hay que pinchar más a menudo.
Para comprobar el punto de cocción, no perfore la piel, sino la carne gruesa de la pierna: el jugo que sale debe ser incoloro. Si todavía está rosado, es necesario asarlo más. Poco antes de finalizar el tiempo de cocción, pincelo el ganso con un poco de miel. ¡Precaución! La miel se vuelve ligeramente oscura.
15 minutos antes de sacar el ganso del horno, reemplazo la bandeja de goteo por una bandeja para hornear. De esta manera puedo relajarme y empezar a hacer una salsa.
Coloco la bandeja de goteo en el fuego y suelto los jugos de la carne con un poco de agua a fuego medio. Luego vierto el caldo en una jarra medidora alta para poder ver la cantidad de grasa que estoy quitando. Pongo el caldo desgrasado en una olla, agrego un poco de jugo de naranja si es necesario y hago una salsa. Espesar con almidón.
Por supuesto que lo sirvo con col lombarda y albóndigas de papa.
